20 abr 2010

ESPACIO DE DISCUSIÓN: Lenguaje y/o verdad. La crisis de la expresión.


MIÉRCOLES 28 DE ABRIL. 16:30-18:30

Están discutiendo:

-Silvia Martínez Fabregat (U. de Valencia)
“La ironía de la razón”
-Jacobo Negueruela Avellá (U. de Murcia)
“Verdad y educación”
-Matías González (U. de Murcia)
“Observaciones sobre metaforología e ideología en relación a la antropología moderna”
-Rafael Moreno Gutiérrez (U. de La Laguna)
“De la casa como espacio ambivalente de liberación”

2 comentarios:

  1. Con relación a la ponencia de Silvia:
    al comienzo de la misma interpretas la crisis contemporánea siguiendo a Ortega como una pérdida de confianza en la razón. ¿No te parece que ya hay bastantes elementos sobre la mesa para considerar superado esto? Me refiero a la crisis del laissez faire neoliberal (contrario a la planificación racionalista, a la regulación) o a las múltiples propuestas que, en el contexto la llamada "sociedad del riesgo", inciden en nuevas formas de racionalización política y productiva. ¿Sigue siendo la crisis de Ortega la crisis de nuestro tiempo?
    Víctor Egío

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  2. Hola Víctor
    Gracias por tu apunte. Ya me comentaron que podría haber confusión con ese punto de mi texto. Vayamos por partes: ¿Sigue siendo la crisis de Ortega la crisis de nuestro tiempo? tal vez no en rigor, pero sí en el sentido en el que él la entiende en tanto que ruptura y cambio en las formas de conceptualizar el mundo dando lugar, por ejemplo como tú señalas, a las políticas neoliberales del laissez faire de los últimos veinte años. La razón es que, precisamente, como señalo, se han perdido los ideales ilustrados de argumentación dándo lugar a un 'todo vale' si la forma en que se enuncia es atractiva, cayendo en simple retórica. Por lo que el poder continúa sustentando el poder al ser una cuestión de retórica y no de argumento válido.
    Con mi texto pretendo poner en claro lo que me parece advertir en la forma de 'conceptualizar' actualmente el mundo; las nuevas técnicas que han entrado en juego y que han conquistado el terreno de la racionalidad. No una defensa de las mismas; habría, en todo caso, que ver cómo éstas van configurándose y si nos arrojan a una visión 'mejor o peor' que lo que ya conocemos.

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